Para una parte considerable de la sevillanilla popular,, resultan totalmente desconocidos muchos de los santos y santas que a día de hoy la Iglesia no ha sabido otorgarles dicho reconocimiento como tal, y que siguen apilados en el cajón del olvido.
Personas que en su momento, dieron lo mucho o poco que tenían, que se dedicaron a los pobres y a la miseria de los barrios, que se volcaron con Sevilla y que dejaron impregnado en cada rincón sus obras de caridad, por encima de todas las cosas.
Muestro como ejemplo al Venerable Padre Tarín, un ser conocido para pocos, y desconocido para muchos,,, fue sacerdote jesuita, digno de que a día de hoy llevase años en los altares como San Francisco Tarín.
Muchísimos milagros envuelven y elevan su nombre hacia los altares del cielo, nació en Valencia, y murió en Sevilla, pues su destino era Marruecos, pero al pasar por nuestra ciudad y contemplar en sus ojos la mísera y la pobreza que había , se quedó en nuestra tierra, aquí supo ganarse a pulso el apelativo de ser“ el león de Cristo” este entrañable gran hombre de corazón, colaboró con los mas pobres, trató con tuberculosos, enfermos, prostitutas y delincuentes. colaboró económicamente con el periódico católico El Correo de Andalucía, organizó casas doctrinales, junto a un sin fin de hechos, que siguen a la espera de ser reconocidos como tal.
Otro gran hombre esperando que le den su sitio fue el sevillanísimo Miguel de Mañara.
Fundador del hospital de la Santa Caridad, un hombre que entregó toda su fortuna, a los mas necesitados, que amó a su ciudad, y según cuentan, siempre fue caracterizado por un alo de humildad en su ser ,que traspasaba fronteras.
De clase acomodada en la Sevilla del siglo XVII ,se desprendió de todo cuanto tenía, para entregarlo por medio de la Hermandad de la Santa Caridad a los mas necesitados,.
Una vez mencionado estos dos ejemplos de hombres que traspasan el límite de la santidad, mi pregunta es:
¿Cuanto tiempo mas van a tener que esperar para dicho reconocimiento?
¿Qué milagros son necesarios para que estas personalidades ilustres en el amor, sean dignos de ser llamados beatos o santos???
Estos días me ha hecho reflexionar sobre este tema, la beatificación de Madre María de la Purísima, una Hermana de la Cruz ejemplar y bondadosa, una religiosa que a paso agigantado y vertiginoso, se está dando a conocer por todos los rincones de Sevilla y de España entera.
Digna de ser santa, por sus innumerables obras, y hechos en vida, pero ¿¿por qué basta solo doce años desde su muerte, para que la consideren beata ( un paso anterior a la santidad), y sin embargo en el ejemplo anterior del Padre Tarín o de Miguel de Mañara , ¿¿ necesitan tantos siglos sobre sus espaldas y tanto tiempo, para que a ambos solo se le haya reconocido y se hayan quedado en el escalafón de ser llamados venerables??
De cualquier modo, estas personas que para mi y para muchos, son santos sin el designio oficial por parte de la Iglesia, de ser considerados así , no necesitan verdaderamente un reconocimiento como tal de cara a la galería , aunque si nos gustaría que lo tuviesen , a las personas que a diario depositan su fe y se encomiendan a ellos.
Y te olvidas de otras como el Venerable Padre Fray Isidoro de Sevilla, que fue prior del Convento de Capuchinos de Sevilla y divulgador de la devoción a la Divina Pastora.
ResponderEliminarO Sor Cristina de Arteaga que fuese priora del Convento de Santa Paula.
Por desgracia todas estas causas necesitan de un postulante, alguien que ponga y pague el abogado que defienda la causa ante la Santa Sede.
Y en muchas casos son la propias órdenes las que se olvidan de ellos, caso de los Jesuitas con el Padre Tarín (al que por cierto le quitaron la calle que tenía dedicada...), de los Capuchinos con Fray Isidoro de Sevilla o de las Esclavas con Marcelo Spínola (solo es Beato cuando ya podría ser santo....).
Tú verás como con el tiempo algún chungales termina en los altares (tipo el fundador de los Legionarios de Cristo, de los Kikos, etc.)
Total ya hay alguno en los altares que resulta tan chocante que esté.....