Todo el barrio de la Feria
se conmueve al ver inerte
a un Dios que abrazó la muerte
con gallarda valentía
Cristo redimió su alma
descendido del madero,
sus manos rozan el cielo,
mi sentir toca el sosiego,
de verte mi Dios sin vida.
Con la Gracia y el Amparo
de la figura materna,
sueña aquel hombre clavado,
entre oración y saeta.
Omniun Santorun será
altar del cielo en la tierra.
Entre saetas y llanto
entre llantos y saeta
el Martes Santo en Sevilla
todos los santos le rezan
al Señor que entre azahares
se aleja por calle Feria.
Muy bien Elena, precioso como siempre... ¡gracias!
ResponderEliminarPrecioso poema dedicado a mi Cristo de la calle Feria.Gracias, amiga Elena
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