Abre las puertas del cielo, que mi Buena Muerte llega,
a los pies su Magdalena, entre susurros confiesa:
“ Si por amar a Sevilla un gran pecado eso fuera
que me castiguen los cielos y me lapiden las piedras”
Por ser la más sevillana, que me siento aquí a Tu vera
cada Domingo de Ramos, entre este cielo de Hiniestas.
“Si por sentir a Sevilla ,un gran pecado eso fuera
que me castiguen los cielos y me lapiden las piedras”
Que vivir en san Julián, y sentirme de la Hiniesta,
no hay castigo en este mundo ,que por ello lo impidiera.
Que mayor sevillana la que siento yo en mis venas,
la de la gubia bendita. que don Antonio me diera.
Que no hay mejor sentimiento ,que el atado a mi melena,
entre aromas de azahares ,de incienso y de tierna cera.
Por eso aquí y hoy Maestro, antes de cruzar la puerta
solo le diré a la gente ,que nunca tiren sus piedras
¿¿ Pues quien viviendo en Sevilla
no se enamora de ella ???
Joder!!! Eres la leche, que maravilla por favor... Has sevillanizao a la Magdalena de una manera preciosa, con un ingenio increible... No te vendas tan cara, Elena y escribe mas amenudo, jejeje...
ResponderEliminarUn besazo fuerte.